Literatura y Universidad

Este post es de tercera mano, o la tercera capa. Lo explico: Forges publicó el miércoles una de sus viñetas en El País, y el jueves Vicente Verdú interpretó el chiste en su columna del mismo periódico, y hoy viernes este post habla del artículo de Verdú. Estimo que la interpretación del chiste se pasa de la intención real de Forges, pero lo cierto es que las palabras de V. Verdú ponen el dedo en la llaga de la situación real de la literatura en los estudios académicos, tanto en la enseñanza secundaria como en la universitaria. No es el lugar, ni el momento de revisarlo, pero puede ser útil abrir una discusión en clase sobre ese cisma entre educadores y educandos del que se habla en el artículo, y que nosotros ya hemos analizado en clase.

La historia y la enseñanza (y la lectura, digo yo)

Por fin parece que se empieza a perder el miedo y el número de noviembre de la revista Mercurio, que he recomedado en clase repetidas veces, aborda de manera monográfica «La tarea de educar». El primer artículo, de la pluma de Antonio Muñoz Molina, pone el dedo en la llaga y señala que «los pedagogos españoles han despojado a varias generaciones de las herramientas intelectuales para comprender el mundo». Ejemplifica con la Historia, pero aún es más grave lo que sucede con la lectura: una parte importante de los estudiantes (también entre los universitarios) tiene dificultades para comprender (cabalmente) lo que lee. Creo que sería bueno para vosotros acercarse a Muñoz Molina y plantearse seriamente hasta qué punto os toca (o no) la cuestión.